Confessions of a Lonely One

I started to think about us. The pain, the pressure, the same old feeling I had before. How everything went pitch-black a few times, how much I suffered. Then I started to open the door. The smell, the creaking bed, the same old thing I lived before. Where everything went downhill so fast, I couldn't even mourn us. It was enough for me. I was lost in time; life had no meaning. Who were you? It was time for me to go; save the goodbyes for yourself. For someone who actually cares. New horizons, new me. No one in sight, I came in peace. A few weeks to lose your smell, a few months to feel my breath.  New year, new hair. No more battles to fight, no more asking myself why. A few days to get my feels back, a few hours to get myself on track. There's something new in the air. Different from how everything else was, smells like home, feels like a warm hug. I wonder what it could be. I'm hoping it will set me free. I wander around there, catching the details and memorising the sens...

Anoche soñé que me llamabas. Soñé que hablábamos de nuevo después de tantos años, y me contabas cómo era el otro lado. No quería despertarme, ¿y si se me olvidaba?  Te contaría miles de cosas, todo lo que te has perdido y todo lo que me queda. Todo lo que ha cambiado desde que no nos vemos. Siempre me pregunto cómo sería mi vida si aún estuvieras aquí, creo que ni siquiera yo sería la misma. Nunca he sido capaz de escribirte directamente. De hecho, nunca he podido ir a verte, y eso me entristece tanto que, aunque me arrepiento todos los días, sigo sin poder cambiarlo. No sé cómo afrontar que te fuiste, no sé cómo sobrellevar la dura carga del olvido. Me obligo a recordar tu sonrisa, tus ojos entrecerrados en la siesta, tu olor. He intentado escribirte, o llamarte, pero tu número ya se lo han dado a alguien diferente. Solo me queda una cosa, mantenerte viva en mí, en lo más profundo de mi corazón, y en mi alma. Cada vez que vea una lantana, cada vez que huela el incienso de marzo, y...

Santas las veces que te pedí perdón cuando no había hecho nada. Santa mi paciencia, mi empatía y mis ganas de seguir queriéndote. Santo el día en que decidí abrir los ojos de una vez, y santa mi hermana, por no soltarme nunca de la mano. Sigo sin creer lo que viví, sigo sin sentir lo que no quería ver de ti. Amén a todas esas noches que pasé llorando en la habitación de al lado, mientras tú dormías sin pensar en lo que había pasado. Amén a mi psicóloga, la única cuerda de esa casa. Amén a los atardeceres y la música que me mantuvieron viva, y amén a todos los niños que me hicieron un hueco en su corazón en aquel momento. Mucha vida en las calles, en los bares y en los juegos de mesa. Mejor que nadie mintiendo, me costaba verte por casa. No imaginas el dolor de verte reír con cualquiera, y aguantar los desprecios cuando volvías. ¿Cómo hemos acabado así? ¿Cuándo decidiste que lo nuestro se había acabado? Una pequeña parte de todo esto se queda tatuado en mi piel para siempre, menos mal q...

Me gustaría no tener cuerpo.  Me gustaría ser agua, espuma o aire,  o todo al mismo tiempo.  Deslizarme, fluir, resbalar.  Querría desatarme de la existencia, maldecir el día que me hiciste llorar. Olvidarte, olvidarlo, olvidarnos. Para siempre, desde nunca, al menos de vez en cuando. No quiero vivir la pena,  no deja de dolerme el dolor. Me angustia mi propia presencia, ¿lo sientes? Ni siquiera lo siento yo. A veces suena de fondo, pero nunca desde el interior. Pensaba que lo teníamos todo, pero tu realidad era otra. Ahora solo queda el vacío, y una vida por medio rota. No es justo, no es justo, no es justo para mí. Me retumba en la cabeza día y noche, dando vueltas como un tiovivo, ya apenas de me deja dormir. Me gustaría ser cemento, hierro y rocas, durar para siempre en el tiempo.  Me cuesta tanto dejar que pase, me olvido y aparece en sueños. Querría cambiar, ser brillante como el sol, podría empezar a vivir, empezar a sentir amor.

A veces no tiene mucho sentido. Solo me disgustas, solo me corrompes y me rompes cuando te apetece. Aún así te echo de menos, entendías una parte de mí indescifrable, completabas mis días y todavía hay una parte de mí que pasaría por tu habitación con un helado de limón el día que estés triste. No sé cómo digerir esto, no sé cómo llevarlo, y, sobre todo, no sé cómo olvidarlo. Parece que te ha sido fácil, y por una parte me alegro, o eso me repito todos los días, esperando que brote en mí algún sentimiento que no sea tristeza. Una mínima parte de todo el amor que te he dado, y gran parte de todo el tiempo que hemos compartido. Ni siquiera te pasaron por la cabeza. Las malas decisiones te han llevado de la mano hasta donde han querido, y qué pena, porque a veces prometías no tropezar con la piedra en la que te has raspado las rodillas más veces de las que puedo recordar. Quise ayudarte, lo mejor que supe y lo único que me dejaste. Rara ha sido la vez que te he negado algo, una palabra. S...

Alguien escribió un comentario hace unos días. Me sorprendió, no voy a mentir. Pensaba que nadie se acordaría a estas alturas. Me siento frente a la pantalla, esperando que me vuelva la inspiración como quien vuelve a casa por Navidad. Me reflejo en el papel en blanco, y siento el vacío en mí como si el arte se apoderara del artista. Llega un punto en el que paro de escribir, no sé si tengo algo más que contar. Llevo meses sin escribir nada, ni bueno ni malo, ni triste ni alegre. Simplemente he dejado de hacer algo que antes consideraba un talento nato.  Todo se me hace grande cuanto más voy creciendo. ¿Y qué quieres ser de mayor? Es la pregunta que más me revolotea por la cabeza. ¿Más mayor? Es la respuesta que siempre aterriza. No sé exactamente a dónde llegará esto, y tampoco quiero preguntármelo, ya he dejado de hacerlo. A veces pienso que la respuesta terminará llegando a mi mente, y a veces vuelvo a aterrizar.  Resulta que no era un talento nato, sino las palabras...

   it's been a while since i've been here. not ready to open up again, not ready to heal cause i felt something inside me was still broken.    i didn't give you all cause i haven't figured how to complete the puzzle yet. i feel lost and numb, completely dizzy and all over the place when i start to remember everything.  i lost an angel some weeks ago and i haven't been able to get my wings back.    pretty cheesy to be heartbroken, you must think. but i just wanted her to be happy, and if she can't find that with me, i have to let her go to find her own path.    look at me, lying on the bed hoping for things to get better as my brain says it was my fault, that i should change, that i should have fought for a person who needed an space i was filling with air instead of love. it feels like drowning except everyone else around you keeps breathing like it's not a big deal.    stop lying to me, you just need one word and you have one minut...